"No he dominado nada
tuyo, nada de ti
se me ha rendido, estás
como te conocí,
y si te doy la mano
o te rodeo con ella
la cintura, me cuesta
todavia acoplarme
a tu temperatura,
porque te temo aún.
Vienes de una ciudad
febril como me gustan,
sin pausas y sin cielo,
una ciudad que no
descansa de su angustia,
iré a São Paulo un dia
a devolverte algo"
Fabio Morábito
quarta-feira, 12 de maio de 2010
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